El oxígeno es esencial para que el cuerpo humano funcione correctamente y es responsable de crear el 90% de la energía que se necesita. Este proporciona los componentes básicos que nuestro cuerpo necesita para sobrevivir y se utiliza en la respiración celular para descomponer azúcares y para producir la adenosina de trifosfato (ATP), la cual suministra energía a nuestras células.

 

Los glóbulos rojos transportan el oxígeno a través del organismo y son la fuente de nutrición principal, necesaria para crecer, reparar y mantener todas las células y tejidos de nuestro cuerpo.

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Los niveles de oxígeno ambiental están vinculados con la inflamación y a menudo ésta viene acompañada de hipoxia.

Se ha demostrado que muchos de los tejidos inflamados tienen niveles de oxígeno inferiores a los normales.

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El aire que respiramos está compuesto en un 21% de oxígeno y el resto es principalmente nitrógeno.

La HBOT es un tipo de terapia con oxígeno que proporciona hasta 100% de oxígeno en un espacio con alta presión.
La presión del aire en la cámara es dos a tres veces más alta que la normal, lo que causa la saturación de oxígeno en el plasma sanguíneo. El plasma sanguíneo oxigenado puede viajar a áreas que están demasiado inflamadas para que los glóbulos rojos fluyan libremente.Este suministra a los tejidos con una saturación completa de oxígeno, lo que permite la curación, propicia la angiogénesis y el crecimiento de nuevos vasos sanguíneos. También estimula la producción de células madre adultas y ciertas sustancias, como factor de crecimiento endotelial vascular. Estos atraen y estimulan a las células endoteliales necesarias para la curación.